Si bien es una enfermedad que no tiene cura, existen actualmente tratamientos que detienen el progreso de la misma y mejoran la calidad de vida de los pacientes. Entre estos tratamientos se encuentran los antagonistas de los receptores de endotelina, inhibidores de la fosfodiesterasa tipo 5, análogos de la prostaciclina y agonistas de los receptores de prostaciclina. (i,ii)
Para ayudar a las personas con HAP a obtener la mejor calidad de vida posible, los especialistas en HAP pueden recomendar uno o más tratamientos, incluidos medicamentos orales, inhalados e intravenosos. (iii)
Las guías internacionales recomiendan el uso de terapia combinada con el fin de impactar las diferentes vías fisiopatológicas y ayudar a detener el progreso de la enfermedad. (iv)